Sin Esperanza

Sin Esperanza

sábado, 12 de enero de 2008

La pintura y la cultura popular mexicana más la imaginería religiosa de los siglos XVII y XIX son las dos fuentes de mayor inspiración para Frida

El espacio en el que transcurre el dolor de sus cuadros es siempre reducido, obviamente autobiográfico, y en Frida se reduce a dimensiones inconcebibles: "Hospital Henry Ford", "Operación cesárea ", "Mi nacimiento ", "Unos cuantos piquetitos", "Sin esperanza". Anais Nin, nos dice: una gran pena me ha hecho construir una caverna para protegerme: mi diario", por lo que, aparte de la singularidad de la invalidez de la Frida pareciera que los espacios limitados en las obras de mujeres artistas son también expresión y dan cuenta de la vida de las mujeres, su condición, reducidas a espacios marginales porque "el gran espacio" (en el caso de Frida y Diego esto queda absolutamente claro) se encuentra ocupado por los hombres.

En los grandes repertorios biográficos su vida no figura, no existe, mientras páginas y páginas ilustran la de Rivera y en alguno de ellos se nombra a Frida Kahlo únicamente como la tercera esposa del pintor.